Mi versión de la educación del sueño es ayudar a los bebés a aprender a conciliar el sueño y a encadenar sus ciclos de sueño de forma independiente para obtener noches y siestas consolidadas y relajantes.
Como padres, tu función es satisfacer las necesidades de su pequeño para tranquilizarlo y guiarlo hacia este cambio. Dependiendo del temperamento de su hijo, esto puede ir acompañado de un período de transición o el niño protestará más o menos. Nunca te pediré que dejes llorar a tu hijo sin darle consuelo.
Permitir que tu hijo encuentre un sueño profundo y reparador es beneficioso para su salud, desarrollo y el equilibrio familiar.